Venezuela crece en negocios con el mundo
¡Una gira por todo lo alto!
Si algo le ha permitido a Venezuela poder disponer de las extraordinarias posibilidades que le ofrecen hoy a los sectores más necesitados de la población los programas y las acciones sociales que el Gobierno Revolucionario adelanta en función del pueblo, son las excelentes relaciones que, ahora, como nunca antes en nuestra historia, tiene el país con todos los países del mundo, en especial con aquellos que han abierto a sus poblaciones las puertas de la justicia y la igualdad social como base de su poderoso desarrollo económico, industrial y tecnológico.
Es el caso de los siete países que el Presidente Chávez ha recorrido en esta oportunidad, ya no sólo para estrechar los lazos de amistad que nos unen con esas naciones hermanas, sino para establecer y profundizar las relaciones comerciales y de intercambio tecnológico con cada uno de ellos.
Rusia, Ucrania, Bielorusia, Irán, Libia, Siria y Portugal, son en esta oportunidad las naciones que reciben al Primer mandatario venezolano con la cordialidad y la hospitalidad de quienes acogen no sólo a un líder que se ha convertido en referencia mundial en la lucha en favor de un nuevo orden multipolar contra la explotación y las desigualdades, sino al representante de una pujante nación suramericana decidida a alcanzar el bienestar y el progreso que el capitalismo salvaje le negó desde siempre.
Contrario a todo cuanto sucedió en el pasado en nuestro país con aquellas inútiles giras presidenciales que solo colmaban a la Patria de vergüenza e indignación, el comandante Chávez regresa una vez más cargado de proyectos y acuerdos consistentes y valiosos para apuntalar el camino del desarrollo y del bienestar social que la Revolución Bolivariana ha emprendido rumbo al Socialismo.
¡Bienvenido, señor Presidente!
- Nacionales:
- En Opinión:
-En Ideología:
Relanzamiento de las 3R es la prioridad
Las pasadas elecciones parlamentarias dejaron en la militancia del PSUV a nivel nacional una extraña sensación en la que se mezclan la alegría por el triunfo obtenido en forma limpia e irrefutable, y la frustración por no haber alcanzado la aspirada meta de los dos tercios de la Asamblea Nacional.
Las diversas opiniones que hasta ahora se vierten en la búsqueda de una explicación consistente a lo ocurrido, se resumen en dos grandes planteamientos encontrados, que aducen, por una parte, la falta de disciplina y hasta de compromiso revolucionario entre aquellos que no cumplieron con el trabajo que la revolución demandó en esta oportunidad en cuanto al aseguramiento del 1 x 10 y de la Operación William Lara ordenada por el Comandante Chávez, y por la otra, la visión según la cual los culpables serían aquellos que de alguna manera han fallado a las demandas del pueblo desde las instancias del Gobierno Revolucionario que están obligadas a brindar los diversos servicios que la revolución debe prestar al pueblo.
Queda claro que la sola ansiedad mostrada por el país chavista pone en evidencia que el socialismo ha crecido de manera exponencial en lo que va de periodo revolucionario, porque la obtención de un 52% que hoy alcanza la propuesta bolivariana está muy distante de aquel legendario e irrisorio 6% histórico del cual en alguna oportunidad habló Luis Bayardo Sardi como el insuperable techo político de la izquierda en nuestro país. Jamás una propuesta socialista ha obtenido tal cantidad de respaldo en un país como Venezuela, signado por la inmensa riqueza petrolera a la que con tanta sed aspira el imperio norteamericano.
Pero, en modo alguno, eso servirá jamás para excusar las desviaciones ni las deficiencias que el proceso experimenta, fundamentalmente hacia lo interno de la revolución, precisamente por el encanto electorerista en el que nos hemos sumido y que nos lleva hacia escenarios inexplicables de pérdida de fuerza precisamente en los sectores populares emblemáticos del "chavismo duro" que por tradición definieron el perfil revolucionario del proyecto bolivariano y que hoy se alinean con la derecha más reaccionaria y retardataria del país.
Tan absurdo (y tan arrogante) como pensar que la actual AN es roja rojita por obra del avance revolucionario y no de la abstención de la derecha en las elecciones del 2005, es suponer que el triunfo en los circuitos en los que ganamos se deba al "esfuerzo" de los estrategas que invitaron al inmovilismo como fórmula de campaña, dejándole el grueso del trabajo pesado al Comandante Chávez.
La revisión hay que hacerla, pero empezando porque los ineficientes den la cara con vergüenza revolucionaria y pongan sus cargos a la orden para dar paso definitivo al poder popular, cuya comprensión y visión del proceso jamás ha estado signada por la equivocación o el derrotismo. El Poder Popular debe ser hoy el contralor y el juez de las 3-R que Chávez ordena.
Es el caso de los siete países que el Presidente Chávez ha recorrido en esta oportunidad, ya no sólo para estrechar los lazos de amistad que nos unen con esas naciones hermanas, sino para establecer y profundizar las relaciones comerciales y de intercambio tecnológico con cada uno de ellos.
Rusia, Ucrania, Bielorusia, Irán, Libia, Siria y Portugal, son en esta oportunidad las naciones que reciben al Primer mandatario venezolano con la cordialidad y la hospitalidad de quienes acogen no sólo a un líder que se ha convertido en referencia mundial en la lucha en favor de un nuevo orden multipolar contra la explotación y las desigualdades, sino al representante de una pujante nación suramericana decidida a alcanzar el bienestar y el progreso que el capitalismo salvaje le negó desde siempre.
Contrario a todo cuanto sucedió en el pasado en nuestro país con aquellas inútiles giras presidenciales que solo colmaban a la Patria de vergüenza e indignación, el comandante Chávez regresa una vez más cargado de proyectos y acuerdos consistentes y valiosos para apuntalar el camino del desarrollo y del bienestar social que la Revolución Bolivariana ha emprendido rumbo al Socialismo.
¡Bienvenido, señor Presidente!
- Nacionales:
- Logros de la Revolución
- En Opinión:
- Editorial
El pasado 26 de septiembre la Revolución Bolivariana consolidó una victoria más al alcanzar 98 diputados a la Asamblea Nacional. La cifra, muy por encima de la lograda por la oposición, refleja la solidez de la unión en torno a un proyecto, a un ideal y al liderazgo del Comandante Hugo Chávez.
Sin embargo, como se sabe, la meta de lograr los 2/3 de la Asamblea Nacional no fue alcanzada, lo que ha supuesto la profundización del debate interno en las filas revolucionarias y el relanzamiento de las 3R dentro de la Revolución Bolivariana.
El primer aspecto a tomar en cuenta en este sentido es de qué manera se asume la crítica revolucionaria. Es cierto que todo proceso socialista necesita de la crítica y la autocrítica por parte de sus militantes, pero siempre y cuando esto se haga de manera constructiva.
Debe ser un proceso que comience en la transformación de lo particular y lo cotidiano para alcanzar los grandes cambios a los que se aspira en el proceso. Las 3R comienzan por la revisión de la propia militancia en relación a sus tareas y sus compromisos de manera local.
En ese sentido, el debate en Baruta, más allá del análisis de lo que pasó en otros Estados o Municipios, debe empezar por determinar qué pasó en el circuito 2 de Miranda, y en particular qué pasó en Baruta.
Para ello no es necesario estudios ni encuestas, sino conocer al pueblo y sus problemáticas. Ahí una primera reflexión, ¿está la militancia psuvista abocada al trabajo junto a las comunidades?
El Comandante Chávez insiste cada vez más en el abandono y la falta de trabajo ideológico hacia la clase media. ¿El PSUV Baruta, con responsabilidades de acción política en un Municipio de una gran población de la clase media, está atendiendo en verdad el llamado de ir a conquistar a esos sectores?
De esa manera deben abordarse el debate y las discusiones internas en este momento. Más allá de las acusaciones o los señalamientos individuales, se trata de analizar si estamos o no, como militantes, a la altura del compromiso histórico que nos corresponde asumir.
Pero, la revisión de los resultados electorales y el debate acerca del rumbo de nuestra Revolución no debe ser alimento para el divisionismo sino para el fortalecimiento de la lucha revolucionaria. En modo alguno debe alejarnos del Comandante Chávez sino reforzar nuestro apoyo y nuestro afecto hacia él, no para empañar los logros alcanzados, sino para exaltarlos y profundizarlos.
Negar los logros de la Revolución Bolivariana sería colocarse en la posición del enemigo. Negar al Comandante Chávez sería negar el liderazgo de quien trabaja día y noche por brindarnos Patria. Como nos lo demuestra nuevamente en esta importante gira internacional.
Sin embargo, como se sabe, la meta de lograr los 2/3 de la Asamblea Nacional no fue alcanzada, lo que ha supuesto la profundización del debate interno en las filas revolucionarias y el relanzamiento de las 3R dentro de la Revolución Bolivariana.
El primer aspecto a tomar en cuenta en este sentido es de qué manera se asume la crítica revolucionaria. Es cierto que todo proceso socialista necesita de la crítica y la autocrítica por parte de sus militantes, pero siempre y cuando esto se haga de manera constructiva.
Debe ser un proceso que comience en la transformación de lo particular y lo cotidiano para alcanzar los grandes cambios a los que se aspira en el proceso. Las 3R comienzan por la revisión de la propia militancia en relación a sus tareas y sus compromisos de manera local.
En ese sentido, el debate en Baruta, más allá del análisis de lo que pasó en otros Estados o Municipios, debe empezar por determinar qué pasó en el circuito 2 de Miranda, y en particular qué pasó en Baruta.
Para ello no es necesario estudios ni encuestas, sino conocer al pueblo y sus problemáticas. Ahí una primera reflexión, ¿está la militancia psuvista abocada al trabajo junto a las comunidades?
El Comandante Chávez insiste cada vez más en el abandono y la falta de trabajo ideológico hacia la clase media. ¿El PSUV Baruta, con responsabilidades de acción política en un Municipio de una gran población de la clase media, está atendiendo en verdad el llamado de ir a conquistar a esos sectores?
De esa manera deben abordarse el debate y las discusiones internas en este momento. Más allá de las acusaciones o los señalamientos individuales, se trata de analizar si estamos o no, como militantes, a la altura del compromiso histórico que nos corresponde asumir.
Pero, la revisión de los resultados electorales y el debate acerca del rumbo de nuestra Revolución no debe ser alimento para el divisionismo sino para el fortalecimiento de la lucha revolucionaria. En modo alguno debe alejarnos del Comandante Chávez sino reforzar nuestro apoyo y nuestro afecto hacia él, no para empañar los logros alcanzados, sino para exaltarlos y profundizarlos.
Negar los logros de la Revolución Bolivariana sería colocarse en la posición del enemigo. Negar al Comandante Chávez sería negar el liderazgo de quien trabaja día y noche por brindarnos Patria. Como nos lo demuestra nuevamente en esta importante gira internacional.
¡Patria Socialista o Muerte!
¡Venceremos!
¡Venceremos!
-En Ideología:
- José Martí: Discurso pronunciado en honor a Venezuela
Relanzamiento de las 3R es la prioridad
¿Qué pasó el 26-s?
Las pasadas elecciones parlamentarias dejaron en la militancia del PSUV a nivel nacional una extraña sensación en la que se mezclan la alegría por el triunfo obtenido en forma limpia e irrefutable, y la frustración por no haber alcanzado la aspirada meta de los dos tercios de la Asamblea Nacional.
Las diversas opiniones que hasta ahora se vierten en la búsqueda de una explicación consistente a lo ocurrido, se resumen en dos grandes planteamientos encontrados, que aducen, por una parte, la falta de disciplina y hasta de compromiso revolucionario entre aquellos que no cumplieron con el trabajo que la revolución demandó en esta oportunidad en cuanto al aseguramiento del 1 x 10 y de la Operación William Lara ordenada por el Comandante Chávez, y por la otra, la visión según la cual los culpables serían aquellos que de alguna manera han fallado a las demandas del pueblo desde las instancias del Gobierno Revolucionario que están obligadas a brindar los diversos servicios que la revolución debe prestar al pueblo.
Queda claro que la sola ansiedad mostrada por el país chavista pone en evidencia que el socialismo ha crecido de manera exponencial en lo que va de periodo revolucionario, porque la obtención de un 52% que hoy alcanza la propuesta bolivariana está muy distante de aquel legendario e irrisorio 6% histórico del cual en alguna oportunidad habló Luis Bayardo Sardi como el insuperable techo político de la izquierda en nuestro país. Jamás una propuesta socialista ha obtenido tal cantidad de respaldo en un país como Venezuela, signado por la inmensa riqueza petrolera a la que con tanta sed aspira el imperio norteamericano.
Pero, en modo alguno, eso servirá jamás para excusar las desviaciones ni las deficiencias que el proceso experimenta, fundamentalmente hacia lo interno de la revolución, precisamente por el encanto electorerista en el que nos hemos sumido y que nos lleva hacia escenarios inexplicables de pérdida de fuerza precisamente en los sectores populares emblemáticos del "chavismo duro" que por tradición definieron el perfil revolucionario del proyecto bolivariano y que hoy se alinean con la derecha más reaccionaria y retardataria del país.
Tan absurdo (y tan arrogante) como pensar que la actual AN es roja rojita por obra del avance revolucionario y no de la abstención de la derecha en las elecciones del 2005, es suponer que el triunfo en los circuitos en los que ganamos se deba al "esfuerzo" de los estrategas que invitaron al inmovilismo como fórmula de campaña, dejándole el grueso del trabajo pesado al Comandante Chávez.
La revisión hay que hacerla, pero empezando porque los ineficientes den la cara con vergüenza revolucionaria y pongan sus cargos a la orden para dar paso definitivo al poder popular, cuya comprensión y visión del proceso jamás ha estado signada por la equivocación o el derrotismo. El Poder Popular debe ser hoy el contralor y el juez de las 3-R que Chávez ordena.
La Loma rumbo a la Comuna
En la transformación del modelo productivo venezolano, de capitalista a socialista, la Revolución Bolivariana promueve la creación de medios y herramientas para que el pueblo venezolano desarrolle sus capacidades, sus proyectos y supla sus necesidades sin tener que depender del capital nacional e internacional.
De esa manera, en el sector Campamento, ubicado en La Loma, Municipio Baruta, se está llevando a cabo un proyecto de gran envergadura, cuya composición consta, por ahora, de nueve proyectos socioproductivos basados en créditos otorgados por el Gobierno Bolivariano.
La comunidad cuenta, entre empresas de producción social, unidades de producción familiar y unidades de producción social directa, con la “Bloquera Socialista Campamento”, el “Taller de Confecciones y Costuras El Milagro”, un taller de muñecas y adornos para el hogar, una fábrica de bolsos, una panadería socialista, un proyecto de floricultura y una unidad de producción de huevos de codornices, entre otros.
Para los diversos productores en La Loma, la diferencia fundamental entre el mercado capitalista y las empresas socialistas consiste en que en estas últimas no se trabaja para el enriquecimiento individual, sino con una concepción humanista que tiene como deber máximo ayudar a la ciudadanía, y sobre todo a los habitantes del sector, a mejorar su calidad de vida.
A través de estas empresas los productos son ofrecidos con una reducción de hasta un 50%. Precio que, aseguran, pudiese reducirse aún más de poder contar con materia prima a un menor costo.
Monumento al fracaso
En la transformación del modelo productivo venezolano, de capitalista a socialista, la Revolución Bolivariana promueve la creación de medios y herramientas para que el pueblo venezolano desarrolle sus capacidades, sus proyectos y supla sus necesidades sin tener que depender del capital nacional e internacional.De esa manera, en el sector Campamento, ubicado en La Loma, Municipio Baruta, se está llevando a cabo un proyecto de gran envergadura, cuya composición consta, por ahora, de nueve proyectos socioproductivos basados en créditos otorgados por el Gobierno Bolivariano.
La comunidad cuenta, entre empresas de producción social, unidades de producción familiar y unidades de producción social directa, con la “Bloquera Socialista Campamento”, el “Taller de Confecciones y Costuras El Milagro”, un taller de muñecas y adornos para el hogar, una fábrica de bolsos, una panadería socialista, un proyecto de floricultura y una unidad de producción de huevos de codornices, entre otros.
Para los diversos productores en La Loma, la diferencia fundamental entre el mercado capitalista y las empresas socialistas consiste en que en estas últimas no se trabaja para el enriquecimiento individual, sino con una concepción humanista que tiene como deber máximo ayudar a la ciudadanía, y sobre todo a los habitantes del sector, a mejorar su calidad de vida.
A través de estas empresas los productos son ofrecidos con una reducción de hasta un 50%. Precio que, aseguran, pudiese reducirse aún más de poder contar con materia prima a un menor costo.
Monumento al fracaso
El estado de deterioro en que se encuentran hoy las calles y avenidas del municipio, son una clara demostración de la incompetencia y la irresponsabilidad de la Alcaldía de Baruta, cuya ineficiencia en el mantenimiento de las arterias viales de comunidades, urbanizaciones y sectores rurales se hace cada vez más evidente.
Resulta inconcebible que, siendo Baruta uno de los municipios más ricos de Latinoamérica, no exista hoy calle alguna en toda la entidad que no presente agrietamientos o daños severos en su capa asfáltica, lo que genera malestar entre la población, que sufre el tener que utilizar a diario vías verdaderamente intransitables, que afectan negativamente la calidad de vida, deterioran los vehículos de la gente y muestran el estado de abandono en que está sumido el municipio, por parte de una Alcaldía cuya proverbial inoperancia para resolver los problemas que aquejan a la población es definitivamente insoportable.
Tal es el caso del ya recurrente derrumbe de vía en la avenida intercomunal de El Hatillo, a la altura del Módulo de Tránsito Terrestre, en La Trinidad, que por no ser reparado debidamente desde un primer momento, vuelve a ceder cada vez que se presenta la temporada de lluvias, ocasionándole a la municipalidad un nuevo y seguramente cada vez más cuantioso e innecesario gasto.
Un verdadero monumento a la ineficiencia y a la falta de disposición a resolver bien las cosas, que acusa directamente a la Alcaldía en su condición de ejecutora de esta pésima refacción, más aún cuando las sospechas de ilícitos en las normas de contratación de obras saltan a la vista.
Un atropello que los baruteños no están dispuestos a aceptar y ante lo cual levantan su más enérgica voz de protesta.
Resulta inconcebible que, siendo Baruta uno de los municipios más ricos de Latinoamérica, no exista hoy calle alguna en toda la entidad que no presente agrietamientos o daños severos en su capa asfáltica, lo que genera malestar entre la población, que sufre el tener que utilizar a diario vías verdaderamente intransitables, que afectan negativamente la calidad de vida, deterioran los vehículos de la gente y muestran el estado de abandono en que está sumido el municipio, por parte de una Alcaldía cuya proverbial inoperancia para resolver los problemas que aquejan a la población es definitivamente insoportable.
Tal es el caso del ya recurrente derrumbe de vía en la avenida intercomunal de El Hatillo, a la altura del Módulo de Tránsito Terrestre, en La Trinidad, que por no ser reparado debidamente desde un primer momento, vuelve a ceder cada vez que se presenta la temporada de lluvias, ocasionándole a la municipalidad un nuevo y seguramente cada vez más cuantioso e innecesario gasto.
Un verdadero monumento a la ineficiencia y a la falta de disposición a resolver bien las cosas, que acusa directamente a la Alcaldía en su condición de ejecutora de esta pésima refacción, más aún cuando las sospechas de ilícitos en las normas de contratación de obras saltan a la vista.
Un atropello que los baruteños no están dispuestos a aceptar y ante lo cual levantan su más enérgica voz de protesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario