jueves, 27 de enero de 2011

Chávez le pone el cascabel al gato

¡El debate es entre dos modelos!

El 5 de enero se instaló formalmente la nueva Asamblea Nacional, integrada en esta oportunidad tanto por diputados de la bancada Revolucionaria como de los sectores oposicionistas que hace cinco años decidieron abandonar por iniciativa propia ese importante escenario político en el que reside el ejercicio de la democracia.
Durante el acto inaugural, signado por uno de los niveles más altos de expectativa de la historia reciente por parte los venezolanos, la oposición hizo gala de su arrogante pretensión de tratar de convertir el hemiciclo de sesiones del parlamento nacional en una auténtica arena de circo, desconociendo arbitrariamente el Reglamento Interior y de Debates de la AN. Algo que ratificó con la insolente violación del protocolo durante la presentación de Memoria y Cuenta del Presidente de la República el día 15 y la violenta arremetida sobre la Directiva de ese cuerpo legislativo en la primera sesión ordinaria del día 20 de este mismo mes.
Venezuela entra así al año 2011, con una oposición a todas luces desesperada y resuelta a tratar de desatar a como dé lugar los demonios de la confrontación violenta en el país, seguramente obligada a ello por su evidente condición de minoría.
Sin embargo, el Presidente Chávez, en una clara demostración de amplitud democrática, les ha dado la bienvenida en su retorno a la institucionalidad avanzada que hoy construimos por decisión mayoritaria los venezolanos, como lo es la Democracia Participativa y Protagónica que propone el Socialismo del Siglo XXI, invitando al diálogo de altura basado en el respeto y en el uso de la ética como norma en el discurso político.
Es la diferencia abismal entre dos modelos de sociedad; la capitalista salvaje y la humanista del socialismo.


- En Opinión:

Editorial

Sin duda alguna el 2010 fue el “año de las dificultades”, como fue catalogado por el Comandante Hugo Chávez. La crisis eléctrica, la estafa bancaria, la estafa inmobiliaria y la crisis causada por las fuertes lluvias a fines de año son algunos de los acontecimientos más resaltantes.
Sin embargo, y a pesar de ello, la Revolución Bolivariana no sólo logró superar las adversidades, sino que avanzó y alcanzó grandes logros, como se evidenció claramente en la presentación de Memoria y Cuenta del presidente ante el país.
De no haber un gobierno comprometido con el pueblo, un jefe de estado entregado a la solución de las problemáticas populares, una organización popular revolucionaria y un pueblo unido en torno a un proyecto, era de esperarse el colapso nacional. Pero no fue así.
Esas conquistas positivas de la Revolución durante el pasado año se deben a un Gobierno que tiene un rumbo, una meta final fijada a través de la construcción de un modelo que mejore la calidad de vida de los venezolanos, por lo que el Comandante Chávez ha llamado a la “repolitización” de las filas revolucionarias y a la "repolarización" del debate.
Con ello se busca reafirmar en la mente de la sociedad que lo que existe es una batalla entre dos únicos modelos posibles: el modelo inhumano y explotador que es el capitalismo salvaje, o el socialismo, que procura la justicia y la igualdad social para lograr el "buen vivir".
Es por ello que el militante revolucionario debe asumirse, ya no solamente como portador de un ideario o beneficiario de una revolución, sino como impulsor de un modelo económico, político y social, al que debe estudiar y conocer para difundirlo y defenderlo y con ello asegurar el avance irreversible de la Revolución.
El llamado del Comandante Chávez es a eso, al estudio y a la concientización para estar a la altura del compromiso histórico que tiene Venezuela hoy en día, así como para hacer frente a la intensa batalla ideológica que se habrá de librar en los años venideros.
El año que se inicia el pueblo tiene el gran reto de reafirmar su compromiso con un hombre que nos ha brindado la oportunidad de tener Patria, profundizar los logros que tanto beneficio han traído, o regresar al pasado de miseria, pobreza y atraso que la oposición pretende borrar de la mente de los venezolanos como una manera de retornar al poder.
El 2012 está a la vuelta de la esquina, hoy más que nunca la unidad debe caracterizar a las filas revolucionarias, la crítica y la autocrítica debe ser ejercida de manera constructiva, el estudio del socialismo debe ser una prioridad y la lealtad al Comandante Chávez debe ser indiscutible.

¡En Baruta nadie se cansa ni se rinde!
¡Con Chávez TODO, sin Chávez NADA!
¡Venceremos!
- En Ideología:
  • Salvador Allende: Discurso en el 40 aniversario del Partido Socialista de Chile (Fragmentos)
- En Comunidad:

¡Toma tu checazo!


Las sesiones en la recién instalada Asamblea Nacional han dado pie a intensos debates. En ellos, la oposición venezolana pretende calumniar al gobierno del presidente Hugo Chávez con falsos números o, como en la mayoría de los casos, sin prueba alguna.
Por el contrario, los diputados de la Revolución, como caracteriza a los voceros del gobierno bolivariano y al propio presidente Chávez, han hablado con la verdad en la mano.
Uno de los momentos más resaltantes en lo que va de sesiones de esta nueva Asamblea fue la presentación de diversos cheques emitidos en el año 1998 por parte de la PDVSA de entonces para financiar actividades particulares de partidos que hoy son de la oposición, entre los que figuran Primero Justicia, cuya fundación como organización política fue financiada, precisamente, con dineros públicos sustraídos del fisco nacional de manera irregular, tal como lo expuso el Diputado socialista Diosdado Cabello Rondón.
Con ello se demuestra la inmoralidad de los opositores, al pretender acusar al gobierno revolucionario cuando desde siempre han sido ellos quienes han defraudado los dineros de los venezolanos, no sólo en usos indebidos, sino dejando con ello a la mayoría en la miseria mientras empresas nacionales financiaban sus aspiraciones políticas.
Ahora se entiende perfectamente por qué los diputados opositores son los primeros que defienden a ladrones, estafadores, corruptos y demás, porque, como ellos mismos alegan, todos ellos son como los delincuentes que defienden.
Precisamente porque detuvo esas atrocidades desde su arribo al poder es que le tienen tanto odio al Comandante Chávez, porque ha sido el primero en defender a los venezolanos, ya sean ahorristas de entidades financieras privadas, compradores inmobiliarios o simples consumidores, y no a los banqueros, a las constructoras, o a los especuladores de los alimentos, de los vehículos, o de los servicios públicos privados de cualquier naturaleza.
Acostumbrados como han estado hasta ahora a proferir acusaciones sin fundamento a diestra y siniestra a través de sus poderosos medios de comunicación privados, no contaban conque el debate que les tocaría asumir en la Asamblea Nacional, una vez electos, sería una contundente confrontación con la verdad. La misma verdad que ellos han querido esconder tras el guión desestabilizador que les redactan desde el imperio. Estaban solos en su intento de salir de Chávez y desconocer la legitimidad del Gobierno Revolucionario, pero les ha tocado recibir la respuesta de un sector mayoritario que defenderá siempre el derecho del pueblo a darse el sistema de gobierno de su preferencia, apelando a cifras irrefutables, como lo constatan los diversos organismos internacionales, de la talla de la CEPAL, la UNESCO, el PNUD, LATINOBARÓMETRO, entre otros, que dan fe, cada día más, de la verdad de lo que pasa hoy en Venezuela.


Chávez presentó las 5 Líneas Estratégicas

La Revolución va hacia el pueblo

El Partido Socialista Unido de Venezuela es hoy por hoy la mayor organización política del país, y una de las más grandes de todo el continente suramericano, gracias al impulso que el Comandante Chávez le ha dado al concebirla como un poderoso instrumento de transformación social, más allá de lo que se propusieron los convencionales modelos estalinistas que privaron en todas nuestras naciones a lo largo del siglo XX.
Desde su nacimiento, hace apenas dos años, el PSUV ha asumido con dedicación revolucionaria el acompañamiento de la propuesta de justicia y de igualdad social que el Presidente ha presentado al país, bajo la égida del Socialismo Bolivariano, colocándose siempre por encima del compromiso estrictamente electoral y convertirse en una poderosa fuerza de aseguramiento del avance de la Revolución en todos los espacios de la sociedad.
Es la inmensa capacidad de organización social que encarna el PSUV bajo el esclarecido liderazgo de nuestro Comandante, lo que ha permitido avanzar consistentemente a lo largo y ancho del territorio nacional en la batalla por la construcción del poder popular, base del modelo de justicia y de igualdad social al que todos aspiramos.
Sin embargo, dado que la naturaleza como la dinámica misma de los cambios y de los retos a los que debemos enfrentarnos es tan intensa como exigente, la necesidad de adecuación de la organización a las siempre nuevas realidades sociales es también cada vez más apremiante.
Por eso el comandante Chávez, en nombre de la Dirección Nacional del partido y en su condición de Presidente del mismo, presentó el 21 de Enero de este año en el Primer Congreso Socialista, llevado a cabo en el auditorium José María Vargas de La Guaira, el nuevo esquema de funcionamiento del PSUV, el cual se resume en las que denominó "Las 5 Líneas Estratégicas", orientadas a profundizar la Revolución a través de un vigoroso proceso de repolitización de la sociedad, para llevarla hasta el más apartado rincón del país, mediante diferentes niveles de organización y de acción revolucionarias, cuyo epicentro serán los denominados "Círculos de Luchas Populares del Buen Vivir", que tendrán como eje motorizador los nuevos "Puntos de Patrulla".
Se trata de darle al partido un nuevo sentido, mucho más integrado a las luchas populares directamente en el barrio, junto a los trabajadores de la ciudad y del campo, a los pequeños productores, los pequeños empresarios, los estudiantes, los pueblos indígenas, las mujeres y los niños y niñas de la Patria.
Un pasó histórico que da el Comandante para colocar a la Revolución Bolivariana definitivamente al servicio del pueblo, superando el viejo modelo según el cual era el pueblo quien tenía que incorporarse a la Revolución, replanteando así la lucha por la construcción del socialismo bajo el esquema de repolarización que plantea el nuevo escenario de confrontación política en el país.
Es el amor infinito del comandante a "ese pueblo glorioso al cual nos debemos", como él mismo lo definió en el evento.


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